lunes, 25 de mayo de 2015

Ana Frank, Diario. Plaza & Janes, S. A. Editores.1985, 1era edición.

La libertad es una de las cosas más valiosas que puede poseer el ser humano, me imagino que no tener libertad es parecido a estar en coma en donde el cuerpo y el ser no son compañeros.

Ana, a pesar de su encierro logró encontrar el amor y eso me parece maravilloso, sin embargo pienso en su hermana y en tantas otras personas que fueron víctimas del aburrimiento, la apatía y la soledad y me da enorme curiosidad saber como pasaban los días, si se sentían útiles o significativos y sobre todo qué los motivaba ante la enorme incertidumbre de no saber cuándo volvería su libertad.
Fabiola Rodríguez Loredo 

FRASES:
El papel es más paciente que los hombres.

La charlatanería es un defecto femenino del que yo bien quisiera corregirme todo lo posible en vista de la imposibilidad de deshacerme del todo de él, pues mi madre habla tanto como yo, si no más. Por consiguiente, como se trataba de un defecto hereditario, poco podía hacer.

No se sabe nunca para qué se puede servir en la vida.

Peleándose de una vez por todas, se llega a conocer a fondo a una persona y se puede juzgar sobre su carácter sin temor a equivocarse.

Ante la posibilidad de poder salvar a alguien, lo demás no cuenta.

El peligro y las tinieblas se cierran a nuestro alrededor y, al buscar desesperadamente una salida, todo lo que conseguimos es chocar los unos contra los otros.

Grande es el espíritu del hombre. ¡Pero sus actos son deleznables!

Se puede hablar de todas las cosas con un muchacho sin mojigatería y sin hacer aspavientos.

Yo no puedo variar el curso de los acontecimientos ni el mundo va a dejar de girar porque yo muera o siga viviendo.

Mientras este sol radiante, este cielo sin nubes, y yo lo sienta en mi alma, no puedo estar triste.

El mejor remedio para el que tiene miedo, o se siente solo o desgraciado, es salir al aire libre y encontrar un lugar solitario donde estará en comunicación con el cielo, con la naturaleza y con Dios. Solamente entonces se siente que todo está bien así y que Dios quiere ver a los hombres dichosos en medio de la naturaleza sencilla, pero hermosa.

El que es feliz puede hacer felices a los demás.

El que no pierde el valor ni la confianza no se morirá nunca de pena.

Aunque te he hablado mucho de ello, en realidad sabes poco, muy poco.

Aquí, yo soy mi única crítica, y la más severa.

No hay modo de evitar que cuatro mujeres angustiadas se pongan a hablar.

A lo hecho pecho, pero hay modo de corregirse.

La mala acción de un cristiano recae sobre quien la ha cometido. La mala acción de un judío recae sobre todos los judíos.

Un ejército de fantasmas formado por anhelos, deseos, ideas, acusaciones y reproches asalta mi mente.

Por lo general, las gentes estúpidas no pueden tolerar a una persona que sea más inteligente o más hábil que ellos.

Pues, en el fondo, la juventud es más solitaria que la vejez. 

miércoles, 6 de mayo de 2015

El psicoanalista. John Katzenbach. Zeta, 2009.

Es tremendo vivir angustiado! No se puede hacer nada sin sentir una repentina contracción de estómago que sirve como recordatorio de que el peligro puede estar presente. En esta angustia es impresionante como se pueden apreciar los momentos más bellos de la vida pasada. 
Pienso que la angustia es la razón por la que también tenemos momentos de serenidad.
Este libro me entretuvo, lo leí en poco tiempo y me mantuvo a la espera de conocer la trama final que a mi humilde punto de vista pudo ser un poco más que bueno.
Fabiola Rodríguez Loredo


FRASES:
Que algo te incomode, no significa que debas ignorarlo.

Locura -pensó-. Pero una locura con un inconfundible toque de inteligencia, porque provocará que me sume a ella.

Tememos que nos maten. Pero es mucho peor que nos destruyan.

Los sueños eran acertijos inconscientes e importantes que reflejaban el alma. 

Conocer los hechos no implica necesariamente comprenderlos.

Lo que se omitía era tan interesante como lo que se podría haber dicho.

El silencio, que sabía que a menudo el sonido más inquietante de todos, no parecía afectarla.

El miedo y el mal son una combinación letal. 

La luz sólo da una apariencia de seguridad.

El mayor lujo de nuestra existencia por miserable que sea, es que no sabemos los días que nos han tocado en suerte.

La gente sin imaginación y sin ideas llena su cabeza con programas y procedimientos. La gente con carácter sabe cuando prescindir de los procedimientos. 

Es más fácil escuchar a alguien un rato e improvisar que sentarse día tras día y penetrar las capas de lo mundano y trivial en búsqueda de lo profundo.

Hacer que una mentira parezca real es complicado -pensó- Exige planificación.

En el juego infantil de la verdad, se establece la confianza a través del riesgo compartido. Tu me cuentas, yo te cuento. Tú me muestras lo tuyo, yo te muestro lo mío. El psicoanálisis desnivela está relación y la convierte en totalmente unilateral.

La necesidad de venganza es tan incapacitante como cualquier neurosis.

Todo el mundo lo recuerda todo.

Algunas mujeres con el aspecto de ésa causan más problemas de lo que valen. Podría decirse que no vale lo que cuesta la entrada.

Las horas siguientes le parecían el recuerdo de una pesadilla, como esos detalles de un sueño que permanecen después de despertarse y confieren una sensación de inquietud al nuevo día. 

No hay dos tristezas exactamente iguales.

El lenguaje es el aspecto brusco de la locura.

Ya me dirá de que sirve una buena arma como ésta si no la maneja un experto.

Un hombre sin pasado puede forjar cualquier futuro. 

Tenía verdadero talento para la interpretación. Su problema era la realidad.

Haz a los demás antes de que los demás tengan ocasión de hacerte a ti. 

Creamos y después, cuando la creación sale mal, queremos culpar a otros, cuando normalmente somos nosotros los responsables.

Nada de lo que ocurre está aislado.

Lo que tanta seguridad le daba a Ricky lo volvía asimismo del todo vulnerable.

Se pregunto si podría inspirar aire que no supiera a duda. 

Cuando alguien muere aprendemos más sobre la vida de lo que sabemos sobre el fallecido.

Tal vez era más difícil de lo que creía desprenderse del lugar que uno ha ocupado en la vida. Llevamos nuestras señas de identidad tanto interior como exteriormente.

El mejor juego es aquel en el que no te das cuenta de que estás jugando.

Lo que era no es lo que soy -se dijo-. Y lo que soy no es aún lo que puedo ser. 

La traición puede volverse mucho más fuerte que el amor.

Es difícil reconocer una cara conocida entre un grupo de desconocidos cuando no se espera.

Decidió que no había nada tan devastador como darse cuenta de que ahora eres el perseguido cuando estás acostumbrado a ser el perseguidor.